Borrego cimarrón, opción para ejidos ganaderos

Al margen de ideologías políticas, al menos en los ejidos ganaderos de Guaymas se debe retomar la iniciativa de contribuir al mejoramiento económico de los productores rurales, mediante el impulso a la cinegética, consideró José Inés Ramírez Salgado.

El ex dirigente campesino CNC y del ejido Francisco Villa ganadero, manifestó que, durante su liderazgo, en el gobierno padrecista se alcanzó el programa de repoblación de borrego cimarrón y mientras se mantuvo, fue un éxito.
Sin embargo, hubo cambios en las políticas oficiales del Gobierno del Estado y los cimarrones que quedan, son de aquella herencia, pero no se ha procurado la repoblación mediante nuevas crías, lo que impide un mayor desarrollo de los ejidos ganaderos.
La cría de borrego cimarrón contribuye a mejorar el entorno ecológico, pues es una especie que, al evacuar, inyecta semilla diversa de arbustos que consumen y eso repuebla la flora silvestre, creando una expectativa favorable para el hato ganadero vacuno, al disponer de pastizales frescos y nutritivos.
Pero además, es fuente de ingresos para el turismo cinegético, que en esta zona del Municipio de Guaymas presenta una gama de opciones.
Si hay una convivencia entre el cimarrón y el ganado vacuno, se presenta una combinación interesante que permitirá a los ejidos ganaderos subsistir en época de estiaje, al tener como alternativa el turismo cinegético.
“En lo particular, conseguimos varios ejemplares hembras y machos que coadyuvaron en este proyecto, pero lamentablemente se olvidaron las autoridades subsiguientes”, expuso Ramírez Salgado.
Precisó que de frente a la próxima temporada de lluvias, es necesario retomar el proyecto esbozado por el ingeniero Edgar Edmundo Lanz Sánchez, quien como director del Tecnológico de Guaymas diseñó un programa de retención de aguas pluviales que tendría usos diversos, pero más que nada, evitaría inundaciones aguas abajo y que afecta a todo el Valle de San José de Guaymas.
Esto es, crear una zona de confinamiento y aprovechar los recursos pluviales provenientes de la Sierra de Robinson, entre otras y con el cual se aprovecharía para la siembra de pastizales, repoblar las huertas de cítricos y reabastecer el acuífero, pero más que nada, salvaguardar la seguridad de los residentes del Valle de San José de Guaymas.